de Edu Molina
(La Duendes Editora, Comodoro Rivadavia, 2013, 116 páginas)
El Sombra es un detective privado sin escrúpulos, con una metodología propia de un matón o de un parapolicial. Adicto a las drogas, admira a Miles Davis, cuya música trata de imitar en compañía de tres ejecutantes tan torpes como él. Lo acompaña un ayudante, Tito, un chico mucho más inteligente, pues interpreta las pistas que conducen al esclarecimiento de los casos.
El libro se divide en tres partes. “Primeras apariciones” deben apreciarse como apuntes que se proponen forjar una idea del personaje y del dibujo que se desarrollará más adelante. Precisamente, con “El caso Kowalski” su arte se consolida apoyado en el guión sólido y profesional de Anabel Caso. En “Felicidad”, Molina cobra vuelo propio como historietista responsable del texto y del dibujo.
Su estilo puede considerarse experimental (no en vano colaboró en el suplemento “Óxido” de la primera época de Fierro). En sus viñetas mezcla elementos del pasado (casas antiguas, dirigibles), del presente y del futuro (los autos y las motos vuelan).
Pero es en su figuración donde el autor se muestra realmente personal e innovador. En su concepción predomina el espíritu de la viñeta-página a la que suele proporcionarle innumerables variantes. Así, las atiborra de objetos y personajes y presenta perspectivas exacerbadas, angulaciones y enfoques audaces, onomatopeyas creativas, notas musicales, innumerables cuadritos, escenas nocturnas con sombras contundentes –como haciéndole un homenaje al protagonista-, e intensos contrastes de blancos y negros -acompañados de sutiles grises- que impactan por su belleza.
No obstante las búsquedas gráficas, su dibujo posee una línea exquisita y luce ágil, fresco y espontáneo, con las viñetas encimándose unas sobre otras. En suma, El Sombra es una historieta desaforada, en cierta forma caótica, casi surrealista, colmada de escenas de una violencia cuya espectacularidad remite a las superproducciones cinematográficas norteamericanas. Y no está exenta de humor lunático, con reminiscencias del underground comix y del feísmo.
Edu Molina (La Plata, 1969) se radicó en 2002 en México, donde realiza storyboards, ilustraciones e historietas. Desde 2009 colabora con La Duendes, en cuyo blog apareció El Sombra semanalmente (entre 5/2009 y 11/2012).
Germán Cáceres
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